Qué significa cada una de las cinco libertades
El concepto de bienestar animal se basa en un marco internacionalmente aceptado conocido como «las cinco libertades», que resumen las condiciones mínimas que todo animal debe tener garantizadas. Estas son: libertad de hambre y sed, es decir, acceso a agua limpia y alimentación adecuada; libertad de incomodidades físicas o térmicas, como contar con un refugio seguro y confortable; libertad de dolor, lesiones y enfermedades, lo que implica cuidados veterinarios preventivos y curativos; libertad para expresar comportamientos propios de su especie, como jugar, explorar o relacionarse con otros; y libertad de miedo y angustia, mediante un entorno estable y libre de maltrato o situaciones estresantes.
Ejemplos prácticos de aplicación en perros y gatos
Aplicar estas libertades a la vida cotidiana con animales domésticos es sencillo si se conoce su comportamiento natural. Por ejemplo, los perros necesitan salir a pasear, oler, correr, socializar y explorar, no solo estar encerrados en casa o en un patio. Los gatos necesitan trepar, rascar, esconderse, observar desde las alturas y tener acceso a zonas seguras y estimulantes. Ambos necesitan ser tratados con respeto, evitar gritos, castigos físicos o manipulación brusca, y tener rutinas que les aporten seguridad. No basta con cubrir sus necesidades básicas: debemos también evitar situaciones que les provoquen miedo, aburrimiento o frustración.
Indicadores de bienestar y señales de alarma
Un animal que se encuentra bien suele mostrar un comportamiento activo y equilibrado, tiene buen apetito, duerme bien, mantiene un pelaje limpio y brillante, y muestra curiosidad por su entorno. Por el contrario, la apatía, el aislamiento, la agresividad inesperada o los comportamientos repetitivos pueden ser señales de que algo no va bien. Las heridas sin tratar, la pérdida de peso, la diarrea persistente o los cambios repentinos de comportamiento también son motivos para acudir al veterinario. Detectar a tiempo estos signos es clave para garantizar su bienestar.
